miércoles, 15 de diciembre de 2010

Buenísima la fiesta de anoche (buenísima la noche).ESA era la mejor forma de despedir quinto año que pudo haber.

Esto no tiene que ver con nada, pero supongo que dormir tres horas me dejó inspirado:


Un tema muy importante y complicado en la vida, es saber elegir batallas.


No me acuerdo quién dijo esa frase, o si la inventé yo, pero es una gran realidad; por más que una persona tenga mucha mucha energía, y sea muy emprendedora y todo lo que quieras, no podés luchar en todos los conflictos que se te presentan en la vida. Es demasiado desgaste, y en muchos casos, muy innecesariamente, lo que hace que luchar, aunque se gane, nos deje peor que si hubiésemos perdido ( victoria pirriana).

Es importante, saber elegir cuándo un conflicto vale la pena, cuando vale la pena arriesgar todo, o nada, o muy poco por algo; ejemplos genéricos así somos más concretos:

Mi padre X es alcohólico; por más que sea una lucha enorme, difícil y desgastante, yo voy a seguir insistiendo y luchando para tratar de ayudarlo a dejar el alcohol. No importa que tan frustrante sea, y que tanta energía me saque, vale la pena, porque es mi padre.

Mi esposa X quiere bautizar a mi hijo, y a mí me parece mal. Si bien para mi ideología, bautizar al chico es influenciarlo mal desde chiquito, comprendo que para mi esposa es realmente muy importante, y para mí no lo es tanto como para ella, por eso, aunque no me guste, voy a ceder en pos de la relación.

Ahí elegí batallas, elegí dónde y cómo, gastar inteligentemente mi energía, en las cosas que realmente valían la pena gastarla.

Ahora, el último ejemplo da pie para más, la cuestión de "ceder" y de los "conflictos", muy importante en las relaciones (padre-hijo, hermanos, pareja, amigos).

A veces, ceder es algo muy difícil, sobre todo, porque en ciertas ocasiones, hay uno que cede mucho y otro que no. Eso ya es un tema más complejo, pero en muchos casos podemos decir, que lo más importante de ceder es saber cuando uno tiene que ser firme en lo que quiere, porque realmente vale la pena, y cuando realmente no.

Lo otro entonces es el tema de los conflictos, y al igual que cuando ceder, cuando buscamos el conflicto se trata de analizar la importancia de lo que queremos. Hay ocasiones en que es realmente necesario ir al choque, enfrentar el problema; pongo por ejemplo lo que le pasó a mis viejos.

Mi viejo y mi vieja son dos personas que no cedían nunca, muy exigentes, querían que todo se haga a su manera (y a menudo eran maneras distintas). Ahora, mi viejo buscaba chocar siempre, buscaba enfrentar el problema siempre, mientras que ella le tenía más miedo a las confrontaciones que a los problemas en sí. Lo que sucedió es que ella se fue guardando en el fondo, sin decir nada, todas las luchas que no hizo, que evitó, llenándose de rencor y frustración y de repente se hartó y se fue a la mierda, sin que mi viejo pudiese comprender que pasaba.

Unos años después mi viejo se emparejó con mi madrastra, ella tampoco es una persona que ceda, pero busca el conflicto constantemente (y viven chocando). Ahora los problemas se tratan, pero todo, todo, es situación de conflicto porque ninguno de los dos sabe ceder.

Las dos cosas entonces: saber elegir las batallas en la vida en general, en cada cosa que pasa, desde que el vecino habla mal de vos a tus espaldas, hasta que la empresa te despidió de repente. Y en las relaciones, significa saber buscar el equilibrio entre ceder e ir al choque, y analizar cuando vale la pena y cuando no.

Bue, si flayé perdonen, dormí 3 horas.

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1 Ando Ganas 2 Arde la ciudad 3 Un Poco de Amor Francés 4 A Veces 5 Lo que me Mata 6 Todo Pasa